Rectificación de Cándido Tomás Lorite, publicado en el grupo INSTITUTO DE ESTUDIOS BAILENENSES

Cándido Tomás Lorite García ha publicado contenido en el grupo "INSTITUTO DE ESTUDIOS BAILENENSES"

Cándido Tomás Lorite García 31 de diciembre de 2013 11:15 Artículo en respuesta a la nota del ayuntamiento DE LOS DIMES Y DIRETES DE BAILÉN Han llegado a mis oídos, me han comunicado, me han dicho, que alguien ha dicho, que alguien ha comunicado que mi último artículo de La Esquina del Gazapo ha molestado a algunas personas. No sé qué pone en ese artículo para que alguien se moleste. Si es cierto y he de rectificar algo de dicho artículo. A saber: la foto que aparece como La Noria no es tal objeto. Me ha comunicado una persona que corresponde, efectivamente a la maquinaria de la fábrica de chocolate; aunque hay otras dos personas que me dicen que era el aparato que hacía generar la electricidad en el cine Miguelito. Yo, por la forma que tiene, me pareció que era la parte de La Noria que subía y bajaba el agua, y así apareció en las redes sociales pero estaba equivocado. Lo siento y pido perdón a quien corresponda y se haya sentido ofendido. Pero el resto del artículo no quito ni pongo una coma de más ni de menos. Si algo está mal que me lo digan a mí, lo que está mal y que no anden diciendo a nadie que me llame o me diga, a otras personas para que llegue a mis oídos que alguien está enfadado por el artículo. Yo sé que no es plato de gusto para nadie que le digan que las cosas no están bien hechas. A los anteriores gobernantes no les gustaba tampoco La Esquina del Gazapo. De la historia del cañón me he enterado hace cuestión de un mes y medio, más o menos. Si lo hubiera sabido antes, antes lo hubiera sacado a colación. No soy persona que se calla ante lo que considera que no está bien. El cañón hay que arreglarlo, porque fue un regalo del Ministerio de Defensa al Pueblo de Bailén y no puede estar en las pésimas condiciones en que se encuentra y adjunto foto para que se vea. Ya digo en el artículo que se lo cedan a las asociaciones de recreadores o cualquier otra asociación, que lo arreglará lo mejor posible para su puesta a la vista en el CIB o en el futuro museo. Y si está “aparcado”, creo que ese no es el mejor sitio. En cuanto a La Noria o Huerta del Sordo, su estado es lamentable. Ahora parece una piscina, sólo hay que ponerle una cubierta y ya tenemos piscina cubierta. Algo que podía estar inmejorablemente hecho, se encuentra mal, muy mal. El dinero que se está gastando en su limpieza ha quedado malgastado con las recientes lluvias. ¿No es posible arreglar estas avenidas de aguas que van a dar al agujero que hicieron en su momento los gobernantes? ¿no es posible arreglar los sumideros, alcantarillas, imbornales o hacer más grandes los desagües en la parte superior de la urbanización situada enfrente de la Huerta del Sordo? De esta manera el agua de correntías que baja por ellas quedaría absorbida, en vez de aparecer toda ella en la “piscina” de La Noria.  Imposible el poder visitar en estos momento un conjunto de Valor Monumental como es la Noria o Huerta del Sordo, con la misma catalogación que la Iglesia de La Encarnación. Hay que mejorar esto. Por eso digo que los dimes, diretes, dile a fulanito que…, dile a fulanito que no…, dile a menganito que aquello que…. No me van. Existe un dicho que viene al pelo: “el dicho que han dicho que tú has dicho, no es dicho que me han dicho que tú has dicho”. A buen entendedor con pocas palabras bastan. Cándido T. Lorite