Páginas

viernes, 29 de abril de 2011

Una manita de pintura. Artículo de Manolo Ozáez para COPE-JAÉN del 29/04/11

Buenos días. A veces uno se pregunta si en la vida que le ha tocado vivir en suerte, está dando lo mejor de sí. Dudamos con frecuencia acerca de nuestra capacidad para opinar, para juzgar, para enseñar. Recelamos al preguntarnos si el compromiso de ser padres lo estamos afrontando con garantías, o si por el contrario nuestro trabajo es una chapuza. En esos momentos, si realmente nos paramos a pensarlo, si nos comemos el coco de veras, sin mentirijillas, analizando en profundidad todos los instantes, todas las decisiones importantes, que hemos tomado u omitido en nuestra azarosa vida, corremos el riesgo de desilusionarnos, de descubrir que esperábamos de nosotros mismos mucho más, todos lo esperaban, y nos persigue la extraña sensación de que nos hemos quedado a mitad del camino. Y nos vuelven las mismas dudas, la misma pregunta sin respuesta de siempre: ¿estamos dando lo mejor de nosotros mismos? ¿Esto es lo mejor que podemos dar, de veras? Creo que no echamos toda la carne en el asador. No arriesgamos. No nos rebelamos. Pasamos apenas de puntillas por las calles, por los espacios cerrados de nuestros hogares, por los problemas cotidianos. Y, en la mayoría de los casos nos preguntamos si las decisiones que hemos tomado no son las que hubiera tomado la parte cobarde que todos llevamos dentro. No es mi intención devanaros el seso, o su destello, el entendimiento. Tal vez sea que nos hacemos mayores TODOS y procede un chequeo a fondo, una revisión de los interiores, por si el uso o desuso nos hubiera dañado la estructura, algo que no tapara una simple mano de pintura.

No hay comentarios:

Publicar un comentario